Eso es lo que todos buscamos en este momento, estar bien a pesar de las circunstancias, o lo que es lo mismo, desarrollar la resiliencia. La resiliencia es la capacidad que tienen las personas de adaptarse y motivarse ante la adversidad, antes los embates de la vida, y el covid-19 la ha puesto de rabiosa actualidad.
A lo largo de la historia se han dado casos de personas que nos han dejado admirados por su capacidad para salir de situaciones francamente duras. Nelson Mandela por ejemplo, pasó 27 años encerrado en una celda minúscula sin perder de vista su objetivo y su ilusión por conseguirlo. Y por supuesto que tuvo momentos de duda, de desánimo, de miedo. Llegó a verbalizar “no soy más que un negro encerrado en el culo del mundo”. Pero consiguió sobreponerse y seguir adelante.
Fuera de esos personajes extraordinarios, en nuestro día a día, también se dan pequeñas tragedias que forman parte de la vida, como un accidente de tráfico, la pérdida del empleo o el no superar unas oposiciones a las que se ha dedicado mucho tiempo. Y ante esos infortunios, hay personas que lo superan en poco tiempo, saliendo reforzadas del percance y otras sin embargo, que se hunden y ya no vuelven a ser las mismas. Si ante el mismo hecho, unas personas lo superan y otras no, eso significa que no son los hechos que nos toca vivir los que nos hacen infelices, sino nuestro modo de abordarlos.
Ahora estamos todos inmersos en la misma situación catastrófica: estamos encerrados en nuestras casas, echamos de menos el contacto de nuestros seres queridos, tenemos miedo de contraer la enfermedad, puede que hayamos perdido a alguien que estimábamos, nuestro trabajo peligra o ha desaparecido definitivamente,…,son tantas cosas que parece una maldición divina. Sin embargo habrá personas que superarán esta situación y saldrán reforzadas y con otros valores de vida y a otras en cambio, les costará más superarlo e incluso puede que necesiten ayuda psicológica para ello.
¿Qué tienen los unos y los otros?¿podemos aprender a ser resilientes?
La respuesta es que SI. En los próximos días hablaremos de cómo fomentar la resiliencia por ver si eso nos ayuda a afrontar los tiempos que nos ha tocado vivir.