“Mi relación de pareja va a velocidad de crucero, rutinaria. Es un problema que tenemos debajo de la alfombra”.
Son muchas las parejas que definen su relación como rutinaria, donde las cosas se hacen por inercia y no porque realmente se desean. Y cuando en consulta preguntamos por las actividades que comparten, las respuestas más frecuentes son ir al supermercado o llevar a los niños a natación.
“Llevo dos semanas que no parezco la misma persona”.
A pesar de estar en la misma ciudad, con el mismo trabajo, con las mismas circunstancias de siempre, y el mes pasado no era capaz de hacerme cargo de mi vida y ahora….
“Es muy duro no saber lo que uno quiere”. La vida de esta persona está en una encrucijada. Cuando ya era previsible como iba a ser su futuro a nivel familiar, profesional y sentimental, el azar hace que todo eso cambie en un momento, y tenga que decidir si se queda como estaba, o se atreve a cambiar.
«Estoy cansada de ser madre”
Terrible frase que hace sentir culpable a quien la experimenta y que sin embargo aparece en la mente de muchas mujeres.
“Ahora hay que ceder pero no sacrificar”
Magnífica definición de lo que hay que hacer para recuperar una relación de pareja deteriorada.
“El trabajar conmigo mismo ha hecho que yo aprenda a buscar mi ritmo para hacer las cosas, en vez de acoplarme al de los demás”.
“El trabajar conmigo mismo”, hermosa frase. Solemos trabajar para los demás y demasiadas veces nos olvidamos de nosotros mismos. Y muchas veces, la persona que lo hace, la persona que piensa en sí misma y trata de cuidarse, es tachada de egoísta.
Ante cualquier catástrofe natural o social, o cuando nos encontramos ante una situación límite, aparece muchas veces la faceta más humana de las personas: la generosidad, la empatía, la solidaridad,… Pero también puede ocurrir que salga la parte más egoísta, la que ve oportunidad de negocio y se lance a sacar el máximo beneficio posible.
«Tenía el conformismo como modo de vida y no me daba cuenta»
Conformismo, resignación, sumisión… palabras que indican que uno se conforma con lo que le ofrece la vida, independientemente de si era su sueño o no.
«En el trabajo hay muchos mandando y pocos trabajando»
Si en una empresa no están bien definidas las ocupaciones el resultado será ansiedad y caos.
«Aun estoy a tiempo para darme más a mí que a los demás»
Suena tremendamente egoísta. Nadie nos ha hablado del «egoísmo bueno» que consiste en tomar conciencia de cuáles son nuestras necesidades vitales y cubrirlas lo antes posible. Porque si no lo hacemos nosotros, nadie se ocupará de ello y podemos acabar resintiéndonos contra el mundo.