“Son más policías que amigos, así que les escondo la verdad”.
Así es como define un joven la relación con sus padres. Que quizá, entre relajar mucho las normas de casa para que nos cuenten todo lo que les sucede tal y como lo hacen con sus amigos, o estar siempre pendientes de lo que hacen mal para reprocharles y castigarles, hay un término medio.